Uno escucha su voz suave, dulce, sabe de lo que habla, domina el tema, no teme hablar, expresar lo que piensa, así, suave, pausada, meditando las palabras, y queda atrapado, apenas se puede imaginar el enorme espíritu que inunda un cuerpo tan delicadamente cuidado, la fortaleza que guarda para seguir adelante en una lucha que parece imposible, una voz que de tan delicada parece contradictoria a su firmeza al exigir, al pelear por los derechos de sus iguales y de todos aquellos que solo buscan leyes justas para todos, respeto a su identidad y libertad para vivir como desean.
“La falta de una ley que no acredita tu identidad te posiciona como un ciudadano de segunda, porque no estamos en las mismas circunstancias de oportunidades laborales (…) mucha gente no tiene sensibilidad, pero es un asunto de vida o muerte”
Psicóloga, idealista, fuerte, valiente, aguerrida… el tipo de personas que me gustan, me hubiera encantado conocerla, hablar con ella; porque no la conozco en persona y nunca lo hare, pero estoy seguro que de haber platicado 5 minutos con ella se habría convertido en una de mis personas favoritas.
“Soy necia, sé que un día tendré identidad oficial que corresponda a mi identidad sexual, podría ser corrupta, pero soy una ciudadana honesta, conmigo y el resto”.
No será posible, está muerta, fue torturada, asesinada y tirada en bolsa de plástico, como muchas otras en este país donde aun existe la discriminación, el odio a lo diferente; gente ignorante que no puede con una visión de un mundo ajeno al suyo, uno donde todos somos distintos, pero tenemos los mismos derechos. Cobardes, violentos, animales asustados que no entienden nada del mundo en que viven, dominados por el miedo y la ignorancia.
“El odio es una condición natural de las personas. Es un proceso que parte de los prejuicios”.
Descansa en paz Agnes Torres, tu muerte no debe quedar impune, tu lucha no quedará en el olvido ni se detendrá, desde Arcadia libre lamentamos tu pérdida, valoramos tu lucha y mandamos un abrazo solidario a tu familia y amigos.
-Del prejuicio al crimen de odio se salta muy fácil, sobre todo si hay una educación basada en estigmas. Es muy fácil convertir a una persona que es violenta, de entrada, en un potencial asesino de quienes considera menos importantes o menos humanos. Y algunos líderes religiosos usan los prejuicios para devaluar la condición de humano de las personas homosexuales o transgénero. El punto clave para que un prejuicio se active y se convierta en potencial crimen es el grado de ideologización y de odio que se fomenta en la persona.
¡No más muertes!
Foto de: http://translatinasdeexito.blogspot.com/2011/09/agnes-torres.html
Citas de:
http://www.eluniversal.com.mx/estados/80437.html
http://ladobe.com.mx/2011/07/crimenes-de-odio-en-puebla-sin-tipificar-ni-prevenir/
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