La frase

Indignados por el no futuro, la opresión y la censura. Por los abusos y robos a plena luz del día de sus democracias corruptas, y sus leyes medievales.

20 de abril de 2010

Animales: ¿mascotas, comida o compañeros?

Hace unas semas llegó a mi correo el siguente texto publicado en El País:





FRANCISCO GONZÁLEZ LEDESMA.


El futuro de la lidia





La memoria del llanto



Perdonen si empiezo con una confidencia personal: yo, que soy contrario a los toros, entiendo de toros. Durante años, cuando me recogieron en Zaragoza durante la posguerra, traté casi diariamente con don Celestino Martín, que era el empresario de la plaza. Eso me permitió conocer a los grandes de la época: Jaime Noain, El Estudiante, Rafaelillo, Nicanor Villalta. Me permitió conocer también, a mi pesar, el mundo del toro: las palizas con sacos de arena al animal prisionero para quebrantarlo, los largos ayunos sustituidos poco antes de la fiesta por una comida excesiva para que el toro se sintiera cansado, la técnica de hacerle dar con la capa varias vueltas al ruedo para agotarlo... Si algún lector va a la plaza, le ruego observe el agotamiento del animal y cómo respira. Y eso antes de empezar.



Vi las puyas, las tuve en la mano, las sentí. El que pague por ver cómo a un ser vivo y noble le clavan eso debería pedir perdón a su conciencia y pedir perdón a Dios. ¿Quién es capaz de decir que eso no destroza? ¿Quién es capaz de decir que eso no causa dolor? Pero, claro, el torero, es decir, elartista necesita protegerse. La pica le rompe al toro los músculos del cuello, y a partir de entonces el animal no puede girar la cabeza y sólo logra embestir de frente. Así el famoso sabe por dónde van a pasar los cuernos y arrimarse después como un héroe, manchándose con la sangre del lomo del animal a mayor gloria de su valentía y su arte.



Me di cuenta, en mi ingenuidad de muchacho (los ingenuos ven la verdad), de que el toro era el único inocente que había en la plaza, que sólo buscaba una salida al ruedo del suplicio, tanto que a veces, en su desesperación, se lanzaba al tendido. Lo vi sufrir estocadas y estocadas, porque casi nunca se le mata a la primera, y ha quedado en mi memoria un pobre toro gimiendo en el centro de la plaza, con el estoque a medio clavar, pidiendo una piedad inútil. ¡El animal estaba pidiendo piedad...! Eso ha quedado en la memoria secreta que todos tenemos, mi memoria del llanto.



Y en esa memoria del llanto está el horror de las banderillas negras. A un pobre animal manso le clavaron esas varas con explosivos que le hacían saltar a pedazos la carne. Y la gente pagaba por verlo.



El que acude a la plaza debería hacer uso de ese sentido de la igualdad que todos tenemos y darse cuenta de que va a ver un juego de muerte y tortura con un solo perdedor: el animal. El peligro del toreo, además de inmoral como espectáculo, es efectista, y si no lo fuera, si encima pagáramos para ver morir a un hombre, faltarían manos y leyes para prohibir la fiesta.



Gente docta me dice: te equivocas. Esto es una tradición. Cierto. Pero gente docta me recuerda: teníamos la tradición de quemar vivos a los herejes en la plaza pública, la de ejecutar a garrote ante toda una ciudad, la de la esclavitud, la de la educación a palos. Todas esas tradiciones las hemos ido eliminando a base de leyes, cultura y valores humanos. ¿No habrá una ley para prohibir esa última tortura, por la cual además pagamos?



Perdonen a este viejo periodista que aún sabe mirar a los ojos de un animal y no ha perdido la memoria del llanto.



Francisco González Ledesma es periodista y escritor.


No puedo estar mas de acuerdo con lo que dice el Sr. González, en un espectaculo de este tipo, solo sufre el toro, y quien piense que es un arte lleno de tradición es incapaz de entender el sufrimiento, sin embargo nuestra relación con los animales es mucho mas compleja que jugar al juez entre los que maltratan y no a los animales. Cuando estudiaba la carrera de veterinaria, en una clase un profesor preguntó quien no estaba de acuerdo en usar animales para experimentos científicos, mi conciencia me obligo a levantar la mano, sentado en prinera fila fuí al que eligió para dejar claro su punto, simplemente me dijo que en tal caso no tenia nada que hacer en la carrera, y perdido en su discurso no me dió derecho a replica, una cosa es no estar de acuerdo y otra muy distinta no aceptarlo, me explico.


Pocos lo saben o lo valoran, pero la medicina y la ciencia han avanzado mucho gracias a los estudios en animales, no hay medicamento que no se haya probado antes en animales, muchas enfermedades se estudian gracias a que se pueden provocar en modelos animales, algunos avances científicos se han logrado gracias al uso de animales de laboratorio; de la misma forma, hay infinidad de productos que provienen de ellos, desde los alimentos como la leche y el huevo, hasta carne, lana o miel, e incluso hay algunos injertos para humanos que provienen de animales, realmente nuestra relación con ellos es mucho mas estrecha y compleja de lo que la mayoría piensa. No puedo decir si el uso que les damos es bueno o no, lo que es cierto es que hay una gran diferencia entre el maltrato animal y el aprovechamiento; y aunque sería ideal que no usaramos otras vidas para satisfacer nuestras necesidades, le verdad es que somos parte del reino animal, y hemos evolucionado siendo parte de la naturaleza en su conjunto, nuestro cuerpo necesita las proteinas provenientes de la carne de otros animales, y a lo largo de la historia de la humanidad hemos modificado a tal punto a varias especies que simplemente se extinguirian si dejaramos de cuidarlas y mantenerlas.


No estoy de acuerdo en maltratar a ningun ser vivo, y los que me conocen saben cuanto puedo querer a mis perros, gatos, roedores, reptiles y demás bichos, pero así como puedo amarlos, tambien es cierto que adoro comer carne y los cerdos, tan tiernos ellos son deliciosos, creo que cada ser tiene un objetivo en esta vida, cumple su función y eso debiera ser bueno, aunque me ofenda el maltrato no puedo rasgarme las vestiduras por que existen los rastros, son especies que hemos desarrollado para ese proposito.


Creo que esto es un asunto de respeto y de darle el valor merecido a cada cosa; en mi experiencia hacen tanto daño a los animales los que los maltratan como los que los aman ciegamente , me he enfrentado a protectores de animales que enfurecidos insultan y agreden a otra persona, a personas que dicen amarlos tanto que no ven que a su lado sus mascotas solo sufren por una fuerte dependencia, o porque en un amor mal entendido los retienen sin ver que no pueden darles la minima atencion necesaria para una vida sana, asi mismo estan los que los ven "tan humanos" que les gritan y golpean por que no entienden cual es el lugar donde deben defecar o que cosas de la casa no son juguetes, como si fueran niños que no aprenden (me pregunto que clase de educación castrante les dan a sus hijos esas personas).


Yo mismo durante alguna época de mi vida me dedique a recoger cuanto perro se me atravezaba para conseguirle casa, pero es una tarea titánica, no hay forma de salvarlos a todos, y tuve que aprender a la mala que a veces solo se puede seguir adelante, intentando ignorar que allí hay un animal solo y necesitado de amor; hay demasiado dolor en el mundo y bastantes problemas lo asedian a uno como para hacerse daño emocional sufriendo por cada ser en la calle, y tampoco es sano arriesgar la salud y las relaciones familiares por llenar la casa de perros que nunca serán adoptados. En el otro extremo, los hay que por tener un status adquieren un perro de cierta raza sin saber lo que implica el adquirir un compañero, que solo ven maquinas de reproducción en perritas, que ignoran no solo las necesidades de la raza, sino las predisposiciones a enfermedades que tienen, lamentablemente solo lo aprenden con experiencia, esta reflejada en cachorros enfermos que suelen morir. Los hay tambien quienes no ven mas que objetos sobre los cuales pueden descargar iras y frustraciones, personas crueles capaces hacer un daño terrible por puero placer, tal es el caso que me llegó via @buscadeunhogar por Twitter, una tercia de idiotas maltratan a un perro con infinita crueldad apoyados por dos perros de su propiedad, la nota la pueden ver en el diario Nayarit en Línea, allí mismo encontrarán el video que los adolescentes subieron a la red, ojo, no recomiendo verlo, conformense con leer la nota, pocas veces he visto algo tan inhumano y creo el video puede afectar profundamente a personas sensibles.


Tristemente este es el mundo que hemos creado, no es la primera vez que veo tal crueldad, y los casos de amor equivocado que hace mas daño que bien son muchisimos, creo que ante todo hace falta educación, enseñar sobre todo respeto, no podemos salvar a los animales en peligro de extincion, ni ayudar a vacas y cerdos a convertirse en carne sin sufrir, y menos aun darle una buena vida a todos los animales callejeros si antes no valoramos a los de nuestra propia especie, si no empezamos a convivir con respeto con nuestros semejantes, por que así como aseguran que los chicos que torturaron al perro seguro se convertiran en delincuentes, deben ver el reflejo, algo esta mal en nosotros si lloramos por un perro en la calle y no podemos conmovernos con la miseria y el hambre que imperan en nuestro propio país; y definitivamente si queremos ayudar a los peludos, emplumados o escamosos amigos, primero debemos aprender a llevarnos bien con nuestros iguales.


Les dejo un video para la reflexión, ¿es un gato satanico? ¿uno muy inteligente que intenta decirle algo a quien lo acaricia? ¿un gato ridiculamente divertido? ¿es torturado y esta sufriendo? ¿Que les provoca? ¿miedo? ¿ansiedad? ¿risa? ¿pena? Lo que sea que vean y les provoque es solo producto de lo que ustedes llevan dentro, amenos claro que sepan de conducta animal y sean expertos en gatos, y entonces puedan decir con certeza que el gato esta...










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